Siempre, desde que tengo memoria usé Google Chrome. (Bueno, usé Firefox por un tiempo, pero vamos a suponer que no pasó). Su velocidad y simplicidad es algo que me gusta mucho. Sin barras añadidas por plugins (a vos te hablo, Internet Explorer) e integrado con Google, cuyos servicios utilizo prácticamente para todo.
Y hace unos meses surgió un nuevo competidor: Vivaldi Browser. De parte de los creadores originales de Opera, prometía traer muchas funciones que este último había perdido desde que había sido comprado por Facebook. Lo probé en su versión Beta y me encantó. Su facilidad de personalización (especialmente de la página de nueva pestaña), el diseño mucho más moderno, bloqueador de anuncios nativo, CSS debugger, y varios filtros útiles para la accesibilidad para personas con problemas de visión.

Técnicamente hablando, Vivaldi se basa en Chromium, el proyecto del cual también deriva Chrome. Utiliza webkit para el renderizado del CSS, por lo cual es compatible con todas los últimos agregados de este lenguaje.
Llevo poco más de una semana utilizándolo a full time, y por el momento no extraño al navegador de Google. Algo que me llevó a realizar el cambio es la facilidad para importar marcadores, historial y contraseñas de otros navegadores, yendo a Archivo>Importar marcadores y opciones. Y por si fuera poco, también funcionan la mayoría de las extensiones de Chrome.
Te invito a probarlo, quién dice, quizás te termina gustando. Podés descargarlo desde Vivaldi.com
Si me canso de Chrone lo probare
Me gustaMe gusta